Pronunciamiento desde los pueblos indígenas en contra de la Reforma Educativa de México
Después de analizar las consecuencias de la aplicación de la reforma educativa impulsada por el actual Gobierno Mexicano, 187 científicos sociales e integrantes de pueblos originarios, participantes del Primer Congreso de Pueblos Indígenas de América Latina (Oaxaca, 28-31 octubre del 2013) nos unimos para pronunciarnos en contra de su aplicación debido a la incongruencia y agravio que dicha reforma representa para la cultura y las lenguas de los pueblos indígenas de México. Los invitamos a unirse a nuestras voces y pronunciarnos juntos a favor de una educación que respete la diversidad intercultural de nuestra realidad mexicana y que además considere la voz de los pueblos indígenas como sujetos de derecho.
He aquí los puntos centrales de nuestra inconformidad:
1.- Más que educativa, se trata de una reforma laboral. Sus políticas desfavorecerán claramente a los profesores de las escuelas multigrado, indígenas, CONAFE y telesecundarias localizadas en las poblaciones indígenas. Estos profesores suelen ser los que reciben menos reconocimiento social y económico.
2.- La reforma propone una evaluación magisterial para determinar plazas, salarios y funciones que quedará a cargo del Instituto Nacional de Evaluación Educativa. A través de este examen se determinará también si los profesores pueden permanecer en su cargo o no. Este proceder de evaluación, carente de definición, planeación y piloteo, pone en tela de juicio su impacto y la eficiencia de sus resultados al no dar cabida a la diversidad educativa de México y, mucho menos, a la enorme variedad lingüística y cultural de sus pueblos indígenas.
3.-Puesto que la reforma educativa no concede un espacio de reflexión para entender la dinámica social de todos los rincones de México, su aplicación impactará irreparablemente la calidad educativa de las escuelas situadas en las localidades indígenas, que como bien se sabe, son siempre las más desfavorecidas.
4.-En su proceder, la reforma educativa excluyó desde sus inicios todo diálogo entre los diferentes actores, dejando principalmente fuera a los pueblos indígenas, sus comunidades y organizaciones. Por ello, consideramos que la reforma educativa impedirá toda posibilidad de dialogo intercultural, haciendo imposible que los pueblos indígenas expongan sus perspectivas sobre la educación que quieren para el reconocimiento y fortalecimiento de sus pueblos.
La autodeterminación de los pueblos indígenas es uno de los temas centrales del convenio 169 de la OIT sobre pueblos indígenas y tribales, y de los Acuerdos de San Andrés Larráinzar, ratificados por México el primero en 1992 y en 1994 y el segundo en 1996. Por las razones antes expuestas, afirmamos que la aplicación de la reforma educativa va en contra del derecho a la autonomía y autodeterminación de los pueblos originarios.